lunes, 27 de abril de 2015

Lepista nuda (el pie azul)



No sé por qué se llama pie azul, ya que no tiene nada azul; se tendría que llamar pie violeta (claro que este nombre ya lo tiene otra seta) o mejor, la seta violeta o mejor aún, seta de láminas violeta. Es una seta preciosa, de un color violeta muy intenso cuando es joven (la silvestre); poco a poco, el sombrero se va poniendo de color parduzco, pero las láminas siguen manteniendo el precioso color violeta; finalmente, también sus láminas se van volviendo de color pardo (yo sólo las cojo cuando las láminas aún están violetas, esto me lo enseñó Lucía. En realidad, selecciono mucho las setas que recolecto; tengo un amigo, al cual le regalo setas, que siempre me dice que no hace falta que le elija las más bonitas, siempre le contesto que son las que cogemos, creo que no acaba de creérselo). Realmente, es una seta prácticamente inconfundible.
Para identificar correctamente las setas, hay que saber de ellas varias cosas, cuantas más características conozcas mejor. Cuando ves en el bosque una seta que crees conocer, sin prisa y sin avaricia, hay que observarla bien e intentar ver todas las características que conoces de ella y así asegurarte de que es la que conoces. Darse por satisfecho y dar por concluida la identificación de una seta mirando sólo el sombrero es un error que te puede llevar a la muerte o a una intoxicación grave. El sombrero posiblemente sea la parte de la seta que te dice menos de ella, simplemente es la parte de la seta que primero ves, por favor nunca pensar que una seta es una u otra sólo fijándose en el sombrero.

El Pie Azul (Lepista nuda). Lo primero que hay que saber, es que es una seta tóxica en crudo, por lo cual siempre hay que cocinarla bien. Además, su pie es muy fibroso, por esta causa no es apto para el consumo humano (los animales se lo zampan todo, algunos humanos también). Suele salir en familias muy grandes, normalmente en círculos, aunque también en hileras. Soporta muy bien las bajas temperaturas y cuando empieza a bajar el termómetro es cuando más actividad tiene, aunque en ocasiones la he encontrado antes de los fríos otoñales. El sombrero se puede hacer de un tamaño bastante grande, en un principio tiene forma de paraguas y después se extiende, el borde suele estar enrollado, en un principio violeta y después pardo, en tiempos de lluvia la seta se autofabrica un canal para desaguar. Las láminas (lo de debajo del sombrero), son lilas, después parduzcas, el pie es de un color lila un poco más claro y con unas fibrillas de color plateado o blanco en forma vertical. Si la arrancas entera, verás que al final del pie, lo que se esconde debajo de la tierra, es algo más gordo y además se lleva consigo parte del micelio. Está bien arrancarla entera (si no estás seguro que sea un pie azul), con cuidado, para asegurarte y así poder ver una característica más de la seta. En ocasiones, al cortar el pie, verás en él unos agujeros que te pueden recordar los que hacen los gusanos, pero np lo son, esto es otra característica de esta seta. Su olor es muy perfumado, en ocasiones (tanto Lucía como yo) hemos olido las setas antes de verlas, ese perfume tan intenso es lo que la hace especial y diferente, pero a su vez también es lo que hace que haya gente a la que le resulta demasiado empalagosa. Sale tanto en pino como en roble. Si la observas bien es casi imposible de confundir, hay muchas setas de color violeta de menor tamaño y frágiles, también hay un par de Cortinarius que son de tamaño parecido y de láminas violeta que se puede confundir, pero éstas tienen el final del pie de forma cónica y tienen sobre las láminas un velo en forma de tela de araña (éstas tampoco es tóxica pero no merece la pena), pero las setas con velo siempre me dan mal rollo (en ocasiones, el velo se lo ha llevado el agua), pero estas setas de las que hablo no tienen el característico olor perfumado que te regala el pie azul.

Cocinarla. Es fantástica, se puede tomar frita, estofada o a la plancha. Yo las hice una vez con manitas de cerdo y pegan muy bien. Una receta de Antonio Carluccio: 200 gramos de shitakes frescos, 150 de pie azul, 650 gramos de calamares, 6 cucharadas de aceite de maiz, 1 cucharada de aceite de cacahuete, 4 dientes de ajos picados, unas cebollas tiernas bien picadas, 45 gramos de jengibre rallado, una guindilla fresca picada, 1 cuchara de salsa de soja, 1 cucharada de vinagre de arros, 2 cucharadas de cilantro picado y un poco de zumo de lima. Trocear los calamares, en un wok o sartén se calientan los aceites (si sólo tienes de oliva también vale), salteas el ajo, la cebolla, el jengibre, y la guindilla, sin dejar de remover. Añades las setas y lo cueces durante 2 minutos. Añadir el calamar, cocinarlo 2 ó 3 minutos, la salsa de soja, el vinagre de arroz, y el zumo de lima. Saltearlo todo sin dejar de remover durante 2 minutos más. Poner sal al gusto y el cilantro. Si lo quieres más líquido puedes añadir un poco de caldo de pastilla. Lucía en una ocasión hizo mermelada de esta seta, curiosa y buenísima (Lucía, te quiero).

Conservarla. Esta seta (sólo los sombreros), como muchas otras, la puedes hacer un poco en la sartén, cuando haya soltado el agua, la retiras, la dejas enfriar y a congelar. A mí particularmente, me interesa mucho el tema del secado y el pie azul se presta bien al tema, por lo que también puedes optar por secar los sombreros, extendiéndolos en un sitio seco, o colgándolos de hilos en el techo, procura que no se toquen unos con otros y, si las setas son muy grandes, cortar en trocitos.
Hablo de esta seta porque el otro día la vi en el mercado de Valencia, es una seta que ya hace años que se cultiva, pero, por desgracia no es fácil de encontrar en el mercado español. La cultivada tiene un color más pálido, yo no la he probado pero me han dicho que está riquísima.



Recuerda que hay setas mortales y otras muchas muy tóxicas. Si no conoces bien la seta que tienes delante no la recolectes y sobre todo no te la comas. Cuida bien lo que recolectes, la mayoría de las intoxicaciones por setas son debidas a la ingestión de ejemplares de setas comestibles en mal estado. Si quieres aprender más sobre nuevas especies, coge 3 ejemplares (de distintos tamaños) de las setas que no conozcas y mételas en papel de plata (evita que se junten con las setas seguras que llevas en la cesta) y muéstraselas a un experto (llévalas a una asociación micológica). No salgas solo al bosque. Lleva el móvil con carga.

lunes, 13 de abril de 2015

Coprinus comatus

Es aconsejable recogerlas sin pie, recortando las partes negras y dejándolas encima de las demás setas, recolectarla antes de volver a casa o llevar una bolsa térmica o nevera con bloques de hielo.



Aunque no es muy común verla en esta época, voy a hablar de esta seta. El Coprinus comatus, es sin duda una de las setas más ricas que existen. Creo.

Sombrero. El sombrero puede medir hasta 15 cm de alto y unos 5 de ancho, esto cuando está cerrado, cuando se abre se asemeja a una campana y suele segregar una tinta negra.
Al principio es blanco, con el tiempo blanco rosáceo y por último negro. Está cubierto de finas escamas blancas, un poco lanudas y en muchas ocasiones está coronado por una parte lisa de un color ocre. El sombrero es fácilmente separable del pie.

Láminas: Láminas prietas y estrechas, primero blancas, después rosáceas y por último negras. Ennegrecen de abajo a arriba (como sólo se comen cuando están blancas, se pueden cortar los trozos que no sean totalmente blancos y desecharlos).

Pie. Pie de 6 a 12cm de altura, hueco, con anillo delgado (casi siempre) y si sacas el sombrero, verás que se va estrechando. El pie no se come.

Olor. No tiene un olor destacable.

Hábitat. En bordes de caminos, en medio de caminos, márgenes de bosques, prados, sobre todo en terrenos removidos (nuevas pistas forestales o cortafuegos nuevos). Sale en época de lluvias, es termófila, de 8 a 14 días después de las lluvias.

Carne. Carne blanca, blanda y frágil.

Época de aparición. De primavera a otoño, pero su época de mayor eclosión es de agosto a noviembre.

Lo que lo hace inconfundible. Su tamaño y forma, su sombreo con escamas, que suelta tinta negra y sombrero separable del pie girándolo media vuelta. (Si coges alguno alguna vez, se lo enseñas a un experto y lo tendrás claro ya para siempre). Es de las poquísimas setas que me arriesgaría a identificar con unas fotos.

Confusión: Sólo se puede confundir con el Coprinus atramentarius, que tiene el sombrero liso y no tiene escamas. Seta que se puede consumir siempre que no tomes alcohol durante varios días (no es un chiste), ya que se convierte en tóxica.

Cuando sale, suele hacerlo en grupos muy grandes, una vez encontré un cado que posiblemente tenía más de 100 ejemplares. Esta seta se echa a perder en cuestión de horas, incluso hay seteros que llevan neverita portátil cuando van a por ellos. El C. comatus es mejor recolectarlo al final de la jornada. Además, si pones otras (setas) encima, se rompen. Son muy frágiles, pero son riquísimas y merecen mucho la pena.

Cómo conservarlas: Son muy complicadas de conservar, en una ocasión Fernando Jordán (un erudito en la cocina de las setas) me dijo cómo lo hacía él y yo lo hago así; de hecho, desde entonces lo hago con casi todas las setas que voy a congelar. Sólo se consumen los sombreros. Los echo a la sartén y dejo que vayan soltando el agua, este agua la voy quitando y la pongo en un vaso y después en una cubitera, estos cubitos tienen un sabor para cocinar espectacular, cuando la seta no saca más agua la retiras y cuando está fría la congelas. En una ocasión vi bolsas enteras de esta seta seca en el supermercado chino de la calle Marcial de Zaragoza.
Cuando la recolecto sólo me llevo el sombrero, le das media vuelta (al sombrero) y oirás un “cric”, esto es que se ha separado el sombrero del pie, el pie seguirá creciendo y te llevas el sombrero (esto es otra característica a tener en cuenta de esta seta). Incluso si la cortas por la mitad de forma longitudinal, la mitad que dejas plantada sigue creciendo.
Mikel el del Xoco los cocina con tinta de calamar y relleno con patas de calamar o gambas y está buenísimo, pero solo está superior o con cebolla. El año pasado encontré unos cuantos y cada vez que los como... Es una de mis setas favoritas, seguro que entraría dentro de mis diez favoritas, incluso entre las cinco.
La tinta que desprenden se parece mucho a la tinta china, en ocasiones se ha utilizado como tinta para escribir. Se utilizó durante la segunda guerra mundial (su tinta) para escribir documentos (los alemanes) y tras un análisis microscópico podían saber si era auténtico o no (el documento), ya que el verdadero escrito contenía esporas del Coprinus.

Recuerda que hay setas mortales y otras muchas muy tóxicas. Si no conoces bien la seta que tienes delante no la recolectes y sobre todo no te la comas. Cuida bien lo que recolectes, la mayoría de las intoxicaciones por setas son debidas a la ingestión de ejemplares en mal estado. Si quieres aprender más sobre nuevas especies, coge 3 ejemplares (de distintos tamaños) de las setas que no conozcas y mételas en papel de plata (evita que se junten con las setas seguras que llevas en la cesta) y muéstraselas a un experto (llévalas a una asociación micológica). No salgas solo al bosque. Lleva el móvil con carga.

Es mejor dejar el pie en el suelo (no como en esta foto) y llevarse sólo el sombrero, girándolo media vuelta, el sombrero se desprende fácilmente del pie, este (el pie) sigue creciendo aún sin sombrero (el pie es demasiado fibroso y no se consume). Es la cesta de un amigo. Ji.