¿QUÉ LLEVAR PARA CORTAR O APALANCAR Y TRANSPORTAR LAS SETAS? ¿POR QUÉ?

navaja setera descansando sobre Amanita muscaria

Para cortar o apalancar hay que llevar una navaja. Digo lo de cortar o apalancar, porque, según mi creencia, que se ha formado (mi creencia) entre lo mucho que he leído sobre experimentos que se han hecho en trozos de bosques cerrados, tanto en Alemania, como en Francia y la tradición (catalana) y las enseñanzas de Mikel (vasco)... en resumen, he llegado a la conclusión que algunas setas hay que cortarlas y otras arrancarlas (apalancando con la navaja), además para ver todas las características de una seta es necesario arrancarla completamente del suelo, sacarla entera.

La mayoría, yo, las arranco, apalancando por abajo con la hoja de la navaja y me ayudo con la otra mano cogiendo con ella el pie de la seta cerca del sombrero, intentando estropear lo menos posible el subsuelo; entre las que corto se encuentran los robellones, algunos Clitocibes y Lepistas; los Coprinus comatus, como ya comenté meses atrás, sólo me llevo el sombrero (dejando el pie en la tierra) ya que dándole media vuelta, al sombrero, se separa fácilmente del pie (el pie no se come y así sigue creciendo tan fresco), al darle (al sombrero) la vuelta, se oye un click (menos de media vuelta), la mayoría de las demás setas la arranco (con cuidado).

La navaja. ¿Por qué navaja y no cuchillo? En realidad para lo de cortar o apalancar lo mismo daría navaja que cuchillo, el tema es por seguridad y comodidad, la navaja puedes llevarla en el bolsillo sin clavártela. Es recomendable abrir sólo la navaja cuando ya estás agachado para cortar o apalancar, no es recomendable ir andando con ella abierta, siempre puedes tropezarte y las armas las carga el diablo. Creo. En este caso, firmemente. Creo firmemente. La navaja no debe ser ni muy grande ni muy pequeña, un tamaño mediano irá bien, claro que esto es una cuestión de gustos o de cariño. Venden unas especiales para setas (no es necesario una de estas) que van muy bien, sobre todo, porque llevan un cepillito. Las hay muy chulas y no suelen ser muy caras, creo que más baratas que las normales, por unos 10 euros o menos puedes conseguir una, si no eliges una de estas, es recomendable llevar un cepillo de dientes para limpiar las setas, es interesante introducirlas en la cesta lo más limpias posibles.

Bastón. Hay gente que lleva un bastón para mover hierbas y demás, además de ayudarse de él para andar, subir, bajar o “escalar” (si es necesario), el bastón va muy bien en algunas ocasiones, pero yo no llevo, los pierdo todos y me da mucha rabia, en ocasiones me busco un palo pero, para ir subiendo en terreno muy empinado, me ayudo de la cesta. Es un complemento que no veo necesario, pero viste mucho.

cestería tradicional en Solsona

La cesta. La cesta, quizá sea el elemento más importante del kit buscadordesetas. La cesta sirve para muchas cosas, además de para transportar las setas, además de airear las setas, también para esparcir esporas, para apoyarte en ella o para dejarla de señal.

Es muy, muy importante utilizar cesta para recolectar setas, nunca bolsas de plástico, ya que las bolsas las estropea. La mayoría de las intoxicaciones por setas no es por comer setas tóxicas, sino, por ingestión de setas en mal estado, de eso hablaré en otro capítulo, cuando hable de la conservación. Pero la moda de comer setas ha llevado a que se encuentren en muchos establecimientos y la falta de tradición en algunos lugares (Zaragoza entre otros) hace que las venda gente, en muchas ocasiones, que no entiende demasiado del tema y he podido ver setas en bastante mal estado en algunas tiendas, además de constatar que la o el tendero tiene muy poca información de lo que vende y no avisa de algún riesgo que conlleva algún tipo de hongo como por ejemplo en los pie azul, el no avisar sobre su toxicidad en crudo y otras cosas, puede llevar a intoxicarse. Mejor sólo comprar lo que conoces o en algún establecimiento que esté algo especializado. Me lío.

La cesta ha de ser de mimbre. Yo las compro en sitios que las hacen a mano, no son demasiado caras y merece mucho la pena. En Zaragoza hay una tienda en el casco. A mí me gusta que tengan el fondo de la cesta elevado, que no toque al suelo, así se airean mejor. El tamaño depende de las pretensiones, a mí las muy muy grandes no me gustan mucho, también las hay con tapas (de mimbre) y son muy prácticas para poder llevar las setas muy limpias, además son anticotillas. La importancia de que el asa de la cesta sea resistente es porque el asa es un lugar de apoyo importante en muchas ocasiones. Siempre llevo algún trozo de papel de plata, para envolver (si es necesario) alguna seta que me haya llamado la atención o que no esté del todo seguro que sea comestible, en ocasiones para otras cosidas campestres, así no las mezclo y se la llevo al especialista de confianza (el mio es Mikel del restaurante el Xoco).

el papel de plata que siempre llevo en la cesta

Creo que con estas directrices (2 últimos escritos de este blog), ya se puede salir al monte bastante bien preparado. En este momento aún se puede recolectar, entre otras, el Hidnum repandum. En este mismo blog, el 28 de febrero de 2013, describo como poder identificarla.

Dejo unas fotos, sobre lo hablado.

Las setas sólo se pueden consumir si estás completamente seguro, superseguro de lo que estás ingiriendo, te va la vida en ello. No merece la pena arriesgar.

     mi cesta y la de Lucía                                                         papel de plata con ramillete de menta